Plaza de Pontevedra, 7. A Coruña.

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ismaelferreiro@yahoo.es

 

 


• El certificador debe ser arquitecto, aparejador o
ingeniero y debe visitar el inmueble. El técnico
debe medir las fachadas, los patios y las ventanas
de ambos, comprobar su espesor y composición,
sus orientaciones e incluso las sombras que reciben
del propio edificio o de otros del entorno. Debe
comprobar el tipo de calefacción y de calentador
de agua. No acepte una certificación que no cuente
con esos  requisitos. Hay establecidas multas para
los casos de falta de certificado y de fraude.

• No es necesario que el certificador esté colegiado,
como se explica en estas páginas web (1) y (2) y en
este correo en respuesta a una consulta que realicé
al INEGA.

• La certificación de eficiencia energética no sirve
para comprobar el cumplimiento de ningún tipo de
normativa, sino para que los potenciales
compradores o inquilinos conozcan la cantidad de
CO₂ y el consumo de energía debidos a la
producción de agua caliente y al acondicionamiento
térmico de los inmuebles.

• En el certificado debe constar la referencia
catastral de la vivienda. Se puede encontrar en los
recibos del IBI. Es una serie de veinte números y
letras.

• La inscripción de los certificados en el Registro
de la Xunta es obligatoria y debe hacerse por
internet. Para ello el ordenador deberá tener
instalado un certificado electrónico de
identificación. Si la hace el técnico, el propietario
debe firmar una autorización para que el técnico
la registre en su nombre. La tasa depende del
tipo de inmueble y de su superficie. Para viviendas
unifamiliares o pisos es de 5 € + 0,08 €/m²

• La autenticidad de la Etiqueta Energética se
puede comprobar en esta página web

• Cuando el técnico certificador no puede
comprobar las características de las instalaciones,
por ejemplo cuando el inmueble dispone de
calefacción o agua caliente central, conviene que
el propietario facilite esa información a través
del servicio de mantenimiento.

• El indicador energético principal corresponde
a las emisiones de CO₂. Para obtener una buena
calificación, aparte del aislamiento, es
fundamental la fuente de energía utilizada en la
calefacción, agua caliente y aire acondicionado.

• Las mejores calificaciones se obtienen con fuentes
de energía renovables. Las calderas de biomasa
(pellets) y el agua caliente mediante energía solar
se considera que no producen CO₂.

• Las instalaciones de calefacción y agua caliente
centrales son más eficientes que las individuales
siempre que estén bien mantenidas y dispongan de
contadores para cada vivienda o local.